Valparaíso, una ciudad de contrastes.

Introducción

La visita de nuestro curso a Valparaiso, ciudad maravillosa para muchos y denostada para otros. Nos ha permitido crearnos una opinión al respecto.

Mostraremos los atractivos turísticos que hay en la ciudad, y los que creemos que a pesar de no ser turísticos también deberían conocerlos. 

Agredecemos a la señora del local artesanal, el señor Alan Gonzales, al señor de los cuadros con diferentes vistas de la ciudad de Valparaiso y a nuestro profesor jéfe Rubén Garrido.

Esperamos que les guste!

¿Por qué ir a Valparaíso?

   Una de las grandes razones de ir a Valparaiso, es su atractivo turístico, lleno de atrayentes, con alrededor de 40 cerros. Con la conocida casa "La Sebastiana" de Pablo Neruda, gran poeta, en uno de estos.

   Hay grandes centros de servicios nacionales como: Congreso Nacional de Chile, Armada de Chile, Subsecretaria de Chile, Servicio Nacional de Pesca, Servicio Nacional de Aduanas y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes. También nombrado Patrimonio de la humanidad por la Unesco.

   Tiene diferentes servicios de transporte por sus micros, sus conocidos ascensores, trolebuses, y metro. También se puede subir a los paseos en botes con un asistente turístico que explicará cada parte del trayecto en estos. Pasando por el Buque Escuela Esmeralda y diferente atractivos.

   Aún con sus diferentes opciones a visitar, las personas que lo habitan son importantes para esta visita. A nuestro parecer los habitantes, de Valparaiso, no son del todo cálidos, con una actitud un tanto agresiva de la visita que se les hace de parte de Santiaguinos, sintiéndose ofendidos, en ocasiones, por nuestras dudas y poca información, sobre Valparaíso, tan importante para ellos.

En resumen, Valparaíso es una ciudad de grandes contrastes, de aporte cultural, social, turístico, de usted depende hacer una gran visita de esta, pero no se preocupe, que Valparaíso hace más simple esa tarea.

  

10 LUGARES IMPRESCINDIBLES EN SU VISITA

TRADIOCIONALES:

Palacio Lyon:

Este edificio es de 1888. Fue ideado por el arquitecto alemán Carlos Von Moltke Koefoed para residencia del empresario naviero Santiago Lyon Santa María. Posee tres pisos con más de 50 espaciosas habitaciones ordenadas en torno a un eje central. Su fachada exterior, profusamente adornada, cuenta con un cuerpo central y dos laterales a la manera de bow Windows; dos pares de columnas de aire corintio soportan la escalera de acceso. Es de los pocos edificios de Valparaíso que resistió el terremoto de 1906. En 1909 la propiedad fue vendida al Ministerio de Educación para albergar en sus dependencias al Instituto Superior de Comercio de Valparaíso. En 1980 el edificio fue transferido a la Municipalidad de Valparaíso, para pasar en 1988 en calidad de comodato a la Dirección de Archivos y Museos que lo destinó al Museo de Historia Natural de Valparaíso.

Palacio de Ross:

En 1888 Juana Ross de Edwards, poseedora de una de las mayores fortunas chilenas de la época, hizo construir este edificio como residencia para su hermano Agustín. La casona fue inaugurada en 1890 y ocupada por el financista y político hasta 1914, fecha en que se muda a Viña del Mar. A su muerte, en 1926, el palacio es adquirido por el Banco de Agustín Edwards y más tarde vendido al Club Alemán de Valparaíso, su actual propietario.

Paseo Mirador 21 de Mayo

Sitio ideal para contemplar los fuegos artificiales de Fiesta de Año Nuevo y uno de los más tradicionales paseos porteños. Su nombre recuerda la fecha del Combate Naval de Iquique en 1879, librado durante la Guerra del Pacífico, entre Chile, Perú y Bolivia.

Situado al borde del acantilado, entrega una de las mejores panorámicas de Valparaíso y la zona portuaria. Al pasear, el visitante se encuentra con venta de artesanías y arbolados rincones para disfrutar del paisaje. Atrás, los bellos jardines que rodean el Museo.

Ascensor Barón:

Inaugurado en 1906, presta servicio al populoso sector de Cerro Barón. La estación baja del ascensor aparece tímidamente tras el centro comercial que remata la Avenida Argentina. La estación alta se alcanza en 35 segundos y la salida da al paseo Mirador Diego Portales, desde donde se aprecia una notable perspectiva de la ciudad hacia el poniente: los cerros, el plan y buena parte de la bahía porteña.

La Sebastiana:

La llamó La Sebastiana en honor a su constructor, Sebastián Collado, un español que, luego de buscar un lugar desde donde pudiera abarcar todo Valparaíso con la mirada, comenzó a edificar esta casa con la intención de vivir en ella cuando sus hijos se casaran. Sebastián falleció. El 18 de septiembre de 1961 Neruda la inauguró e invitó a sus amigos a festejar. Con la muerte de Neruda, la casa quedó deshabitada por mucho tiempo, pero gracias a la Fundación Pablo Neruda se logró reconstruir la legendaria casa del poeta. Se buscó con exactitud el color de cada pared, la ubicación de los cuadros y objetos de Pablo intentando encontrar el modo y la forma en que sólo Neruda sabía distribuirlos. Hoy se puede disfrutar de una visita al pasado dentro de La Sebastiana para ir descubriendo en cada uno de sus cinco pisos la forma de vida y los momentos más gloriosos y absurdos de quien fuera su dueño. También se puede contemplar sus preciados objetos como el cuadro de su queridísimo Lord Cochrane, sus platos con globos aerostáticos, su querido sillón que se le hacía llamar “La Nube” entre otras cosas.

 no tradicionales:

Mercado Puerto:

Frutas, verduras y productos del mar. Mercado de abastos en el primer piso y  cocinerías en los niveles superiores. La degustación de platos típicos suele ir acompañada por cantores populares que van de restaurante en restaurante.

No son restaurantes de cinco estrellas pero la mezcla de la cultura chilena y las Reinetas, Merluzas, Locos, entre otros pescados y mariscos sacados de nuestro mar cautivarán tu paladar en un instante.

Calle Templeman

Es una calle central y estructurante, que sube a lo largo de nueve empinadas cuadras, desde el Paseo Gervasoni hasta la Plazuela San Luis, siguiendo las ondulaciones de los cerros Concepción y Alegre. Ofrece vistas espectaculares del mar y los barcos en el horizonte.

Sendas Santo Domingo:

El Cerro Santo Domingo, por estar ubicado justo atrás de la Iglesia de la Matriz. Fue poblado y construido a lomo de burro, único medio de transporte y de carga en ese entonces. Así se originaron las primeras trazas de lo que hoy son las intrincadas sendas y escalinatas que se encaraman cerro arriba y que hacen de él una zona eminentemente peatonal.

Plaza mirador Bismark   Recuerda al canciller alemán Otto von Bismarck. Está rodeado por una gran balaustrada y cuenta con una plaza de juegos, palmeras y araucarias. Desde la plaza baja la calle Atahualpa, en pendiente y con imponente vista a la antigua cárcel, los cementerios y las iglesias y casonas del Cerro Concepción. Una de las mejores visuales del anfiteatro porteño, excelente ubicación para gozar el   espectáculo del “Año Nuevo en el Mar”. Paseo Bellavista Históricamente el borde costero, entre el Puerto y el Muelle Barón, ha sido destinado a faenas portuarias. Con el fin de abrirlo a la ciudad se construyó en 2006 el Paseo Bellavista, una vereda de  cuatro metros de ancho y 450 metros de largo que pretende dar continuidad al paseo peatonal frente al mar. En el futuro próximo, esta vía conectará con el Muelle Barón y el Paseo Weelwright.

El lado B de Valparaíso: Valparaíso como es ya es conocida nacional e internacionalmente es una sede de la cultura y arte chilena también así como de costumbres típicas como la pesca y tradiciones criollas, sin embargo aquí también existen problemas, y más de los que se aparentan uno de ellos es la fauna felina y canina que abunda por sus calles la taza de reproducción de estos es mayor incluso que los que habitan en casas y son domésticos, no de los desafíos de la ciudad ha sido esterilizar a los caninos parra evitar su reproducción , sin embargo aun queda un gran camino por delante y educación hacia su población sobre el abandono y cuidado de estos mismos. Otro de sus grandes problemas es el mantenimiento de los emblemáticos ascensores,  ya que el estado posee la preferencia de la compra de estos sin embargo el cierre paulatino de estos ha “desesperado” a la mayoría de la población dejando a los dueños sin más opción que vender los ascensores a privados, ante la falta de compromiso del estado en su compra, sin embargo, se hizo hace una semana una oferta de arriendo a la compañía de ascensores de Valparaíso, empresa dueña de 10 de los 15 ascensores del puerto, en espera de que el Estado concrete su promesa de comprarlos.  La cual podría otorgar una solución temporal del problema. Pregunta a residentes: ¿Qué tiene de especial la ciudad de Valparaíso? Conclusión Bueno como pudimos apreciar, Valparaíso puede ser un lugar muy bonito turísticamente pero también tiene su lado malo, tanto como las calles sucias en algunos sectores o la gente  durmiendo en la calle ya sea por no poseer hogar estable. Olvidando lo malo pudimos apreciar los efectos de la modernidad sobre Valparaíso. Tenemos una bonita ciudad que a pesar de todo sigue surgiendo y soñando con ser más que un simple puerto, cada vez creciendo más en todos los sentidos.  Bonita vista, gente acogedora y un lindo ambiente. Eso es lo que te espera en Valparaíso!

Reportaje por:

Alondra Díaz

Camila Esparza

Yvonne Reyes 

Belén Silva